Madrid es una de las ciudades con más oferta gastronómica de Europa, y el fast food no es la excepción. En los últimos años han surgido propuestas que combinan rapidez, sabor y calidad, dejando atrás la idea de que la comida rápida tiene que ser poco saludable o aburrida.
Desde burritos con sello vasco hasta focaccias italianas, hamburguesas smash, kebabs gourmet, poke bowls y pizzas dobladas para comer andando, la capital está llena de opciones irresistibles.
Aquí te dejamos una guía con los mejores fast food en Madrid para todos los gustos y presupuestos.
1. Gazteka – Burritos y cookies irresistibles
📍 Dirección: Calle Noviciado, 2 (Malasaña)
💶 Precio medio: 10–15 €
Gazteka es el ejemplo perfecto de cómo el fast food puede ser casero, fresco y con mucho sabor. Nació en Galicia y ha conquistado Madrid con su propuesta de burritos, bowls y galletas caseras.
Puedes montar tu burrito a tu gusto, eligiendo entre diferentes bases (pollo, ternera, pulled pork, veggie) y acompañamientos con salsas caseras. Sus bowls son igual de populares, ideales si buscas algo más ligero.
Y ojo con su postre estrella: la cookie Gazteka, recién horneada y con trozos de chocolate fundido, se ha convertido en un clásico entre los fans de la marca.
Un local cómodo, moderno y con ambiente joven, ideal para comer rápido, pedir para llevar o disfrutar en su barra con buena música.
Fuente: Madrid Diferente
2. Divorare – Focaccia italiana “street food”
📍 Direcciones: C/ Génova 5, C/ Sagasta 22, C/ Princesa 36, C/ Cardenal Cisneros 34, y más sedes en Madrid
💶 Precio medio: 9–13 €
Divorare ha revolucionado el street food madrileño con su especialidad: la focaccia italiana gourmet. Horneada cada mañana en su obrador, su base es crujiente por fuera, esponjosa por dentro y perfecta para rellenar con ingredientes de alta calidad.
Entre sus focaccias más populares están:
-
Mortadela, stracciatella y pistacho, un clásico de la casa.
-
Porchetta y provolone, con un toque de mostaza antigua.
-
Prosciutto y rúcula, con crema de parmesano.
También ofrecen opciones vegetarianas y dulces, además de bebidas italianas artesanales. Es un plan ideal para comer rápido, con sabor auténtico y sin gastar demasiado.
Fuente: Hello Valencia
3. Pink’s – Hamburguesas smash con estilo
📍 Dirección: Calle San Vicente Ferrer, 44 (Malasaña)
💶 Precio medio: 11–14 €
En el corazón de Malasaña, Pinks es un burger joint moderno con alma californiana. Aquí las hamburguesas son 100% carne de ternera fresca, cocinadas al momento y con técnica smash: finas, crujientes y llenas de sabor.
Entre sus imprescindibles destacan:
-
Classic Smash, con queso americano, pepinillos y su salsa especial.
-
Double Trouble, para los más hambrientos, con doble carne y doble queso.
-
Truffle Burger, con salsa de trufa y cebolla caramelizada.
El local tiene un ambiente retro, neones y buena música, perfecto para disfrutar de una comida rápida pero con estilo.
Fuente: Esquire
4. Jekes – “Kebabs pero bien”
📍 Direcciones: Calle Edgar Neville, 39 (Bernabéu) y Calle Méndez Álvaro, 4 (Atocha)
💶 Precio medio: 9–12 €
El eslogan de Jekes lo deja claro: “Kebabs, pero bien”. Este concepto madrileño ha conseguido elevar el clásico kebab a una experiencia gourmet sin perder la esencia del street food.
Su menú se centra en durums, kebabs y bowls preparados con carne de primera calidad, salsas caseras y vegetales frescos.
Algunos de los favoritos del público:
-
Durum de pollo marinado con yogur y especias.
-
Kebab mixto con salsa picante Jekes.
-
Falafel Bowl, perfecto para los que prefieren opciones vegetarianas.
El local combina diseño moderno con estética urbana, y es una parada imprescindible si te apetece un kebab diferente, sabroso y bien hecho.
Fuente: Enjoy Zaragoza
5. Healthy Poke – Poke bowls frescos y coloridos
📍 Varias ubicaciones: Gran Vía, Castellana, Goya, Sol, Caleido y más
💶 Precio medio: 10–12 €
Si lo tuyo es comer rápido pero saludable, Healthy Poke es una de las mejores opciones de fast food en Madrid. Su filosofía combina ingredientes frescos, bases ligeras y sabores tropicales en formato bowl.
Puedes crear tu propio poke desde cero eligiendo la base (arroz, quinoa o ensalada), la proteína (salmón, atún, pollo o tofu), y los toppings. También ofrecen combinaciones ya diseñadas por sus chefs:
-
Aloha Salmon, con mango, aguacate y salsa ponzu.
-
Chicken Thai, con pollo, anacardos y aderezo picante.
-
Veggie Bowl, con tofu, algas wakame y sésamo.
Es perfecto tanto para comer en local como para pedir take away o delivery. Un concepto saludable, rápido y visualmente irresistible.
Fuente: Tripadvisor
6. Pizza Wallet – Pizza napolitana doblada para llevar
📍 Dirección: Calle Cardenal Cisneros, 34 (Chamberí)
💶 Precio medio: 8–10 €
Cerramos esta ruta con una propuesta original que ha conquistado Madrid: Pizza Wallet, la pizza napolitana doblada por la mitad, lista para comer con las manos.
Inspirada en el formato a portafoglio típico de Nápoles, la pizza se pliega en forma de cartera (de ahí el nombre wallet), lo que permite disfrutarla en la calle, en el parque o caminando.
Entre sus sabores más recomendados:
-
Margherita, el clásico infalible.
-
Tartufina, con crema de trufa y mozzarella.
-
Diavola, con salami picante y toque de miel.
La masa es ligera, fermentada durante 48 horas y cocida en horno de piedra. Si eres amante de la pizza auténtica, es una parada obligatoria.
Fuente: Tapas Magazine
El fast food en Madrid ha evolucionado: ahora se trata de disfrutar comida rápida sin renunciar al sabor ni a la calidad.
Locales como Gazteka, Divorare o Pinks demuestran que se puede comer bien y en poco tiempo, mientras que Jekes, Healthy Poke y Pizza Wallet ofrecen alternativas internacionales con identidad propia.
Cada uno tiene su encanto: los burritos y cookies de Gazteka, las focaccias de Divorare, las hamburguesas de Pinks, los kebabs reinventados de Jekes, los poke bowls de Healthy Poke y las pizzas dobladas de Pizza Wallet.
Así que si te preguntas cuál es el mejor fast food en Madrid, la respuesta depende de tu antojo del día. Pero una cosa está clara: la capital está llena de propuestas que harán que comer rápido sea todo menos aburrido.
